Todos los dispositivos terminales USB 3.0 soportan un conjunto común de operaciones generales: conexión y desconexión dinámica, asignación de direcciones, configuración, transmisión de datos, administración de energía, procesado de peticiones y errores.
Los dispositivos terminales notifican sus propiedades mediante el uso de descriptores. Un descriptor es una estructura de datos en formato predefinido. Cada descriptor empieza con un campo de un solo byte que contiene el número de bytes del descriptor, seguido por un campo de un solo byte que determina el tipo de descriptor.
Cada configuración puede utilizar descriptores o partes de otras configuraciones. Los dispositivos terminales también pueden tener unos descriptores especiales de acuerdo a su clase o al fabricante.
Existen varios tipos de descriptores – Descriptor de dispositivo, Descriptor de configuración, Descriptor de interfaces asociadas, Descriptor de interfaz, Descriptor de punto final, Descriptor de punto final SuperSpeed, Descriptor de cadena y de almacenamiento de objeto de dispositivo binario BOS (Binary Device Object Store).
El descriptor BOS define el descriptor raíz (root descriptor), que es similar al descriptor de configuración y es el punto de partida para el acceso a un conjunto de descriptores relacionados. Estos descriptores se dividen en varios tipos. Wireless USB describe las capacidades del dispositivo para la interfaz USB inalámbrico. La extensión del USB 2.0 es el descriptor que indica la posibilidad de gestión de energía extendida y de modo de alta velocidad USB 2.0. La capacidad de los dispositivos USB SuperSpeed que describen, por ejemplo, el soporte de los diferentes modos de velocidad o períodos de transición de U1 y U2 al estado U0. El último descriptor es el ID de contenedores que contiene un número de identificación que permite a la identificación de huésped del dispositivo terminal, independientemente del modo en el que el dispositivo terminal esté funcionando.